Concebido como un espacio para la integración, el Parque Cultural de Valparaíso supera la condición anterior del sitio, una ex cárcel con tipología de claustro y con grandes planos amurallados hacia el exterior. El diseño actual incluye un conjunto de tres edificios de casi 10 mil metros cuadrados en total, que se disponen en torno a un parque, en un terreno de 2,5 hectáreas. El programa arquitectónico cuenta con espacios para residencias, sala de exposiciones, un teatro, espacios de lectura para niños, salas de ensayo para música, danzas y prácticas de circo.
Se trabajó sobre 3 ejes principales: la “arquitectura de reciclaje” a través de una re-significación de la Galería de Reos, el desarrollo de la “arquitectura paisajista” con la consolidación del parque y la “nueva arquitectura” con la incorporación de una nueva fachada.
El proyecto estuvo a cargo de los arquitectos Martin Labbe, Jonathan Holmes, Carolina Portugueis y Osvaldo Spichiger, y fue el ganador de entre más de cien propuestas que participaron en un concurso público.
Se trabajó sobre 3 ejes principales: la “arquitectura de reciclaje” a través de una re-significación de la Galería de Reos, el desarrollo de la “arquitectura paisajista” con la consolidación del parque y la “nueva arquitectura” con la incorporación de una nueva fachada.
El proyecto estuvo a cargo de los arquitectos Martin Labbe, Jonathan Holmes, Carolina Portugueis y Osvaldo Spichiger, y fue el ganador de entre más de cien propuestas que participaron en un concurso público.