En el medio del bosque en Valle de Bravo, México, cinco casas están dispersas en la tierra rodeada de montañas. Cada casa (las cinco con la misma tipología) consta de 6 volúmenes colocados de tal manera que generan un patio central. El patio, además de las vistas, le da silencio y privacidad. Estos volúmenes están cerrados hacia el norte, siendo este el acceso a las casas que se abren con grandes huecos hacia el sur a través de las vistas del jardín y el bosque, aprovechando al máximo la luz natural.