EPM (Empresa de servicios públicos de energía y aguas de Medellín), a partir del estudio de un plan maestro de iluminación urbana, realizado de manera integral en los componentes sociales, medioambientales, técnicos y urbanos en la noche, encuentra una serie de aspectos reveladores de como su propia infraestructura de servicios públicos cumple un rol fundamental en el desarrollo de la ciudad.
A partir de diagramas y capas sobrepuestas en la noche con la iluminación de la ciudad, la cartografía de Medellín y su infraestructura, se revelaron una serie “islas oscuras” incrustadas en el tejido urbano. Zoom en estos puntos a una escala más cercana, EPM identifica como su propia infraestructura de servicios públicos se encuentra en unas áreas críticas del desarrollo urbano de Medellín: los puntos fueron los tanques de agua ubicados en comunidades altamente pobladas con graves necesidades de espacios públicos de calidad y de equipamientos básicos.
Luego de los respectivos análisis más profundos y visitas exploratorias a cada uno de los sitios, la compañía empezó a buscar en su infraestructura, y con ojos diferentes, como dicha infraestructura se convertía en una oportunidad inmensa de integración con el desarrollo urbano en dichas comunidades.
Ante la condición de oscuridad vista a partir de la iluminación pública en la ciudad, se redescubren lugares con cualidades espaciales nocturnas particulares. Territorios privados de EPM que antes estaban en la periferia urbana, hoy están inmersos dentro de un desarrollo urbano informal complejo, lleno de necesidades y altamente densificado.
Los tanques y su infraestructura de servicio de acueducto, se convierten así en oasis privilegiados oscuros y cerrados con un potencial para convertirse en el corazón y el alma de las comunidades donde se encontraban, brindándole a los barrios una oportunidad inmensa de integrarse al resto del desarrollo urbano a través de un espacio público digno.
Se encontraron 144 tanques de agua inmersos en el tejido urbano, los cuales se analizaron bajo aspectos de área útil, densidad poblacional y necesidades de las comunidades colindantes, restricciones geológicas, expansión del servicio de acueducto y su entorno. De acuerdo a esto se detectaron 32 tanques con la posibilidad de desarrollo, de los cuales se seleccionaron 12 áreas de intervención para el inicio de su ejecución.
El tanque y su infraestructura es el “edificio”. Esto quiere decir que se le daría simbolismo y dignidad al propio tanque, es decir, el tanque seria la infraestructura urbana a resaltar, y por lo tanto la arquitectura que se tuviese que construir, debía ser discreta para resaltar los valores de los tanques existentes.
La topografía como generadora de la forma del proyecto. Debido que los lotes se encuentran en sitios de ladera muy pronunciada, la forma del espacio urbano deberá acomodarse a dicha condición, asunto que facilitaría aspectos técnicos y constructivos y además daría la posibilidad de encontrar de manera adecuada el sitio del edificio que se requeriría. En ese sentido el edificio se mimetiza dentro del terreno.
Conexiones. Debido a que dichos lotes se encontraban cerrados en su perímetro, se enfatiza en la conexión de los senderos y sistemas de movilidad que se encontraron alrededor de dichos cerramientos. De esta manera, comunidades que antes encontraban aisladas encontraron una posibilidad directa en integrase con otras comunidades de su propio barrio.
fuente: arquitecturapanamericana.com